jueves, 11 de noviembre de 2010
Día ocho.
La verdad es que llevaba bastante escrito.
Puede que fuese uno de mis textos más largos y expresivos.
Puede que fuese un texto mediocre o puede que no.
Pero pensé que no necesito mil palabras para expresar lo que siento.
A veces no puedo explicar lo que pienso sin extenderme...pero este no es el caso.
Un párrafo, o una frase.
Puede que incluso tres palabras.
Música, Luz, Amor.
Puede que fuese uno de mis textos más largos y expresivos.
Puede que fuese un texto mediocre o puede que no.
Pero pensé que no necesito mil palabras para expresar lo que siento.
A veces no puedo explicar lo que pienso sin extenderme...pero este no es el caso.
Un párrafo, o una frase.
Puede que incluso tres palabras.
Música, Luz, Amor.
martes, 9 de noviembre de 2010
Día siete.
A lo lejos otra estrella.
Viajo por este sector desde hace unos años.
Busco señales de vida.
Cada planeta que encuentro esta muerto.
Ruinas de antiguas civilizaciones me reciben.
Polvo y recuerdos.
Los esqueletos de naves gigantescas orbitan alrededor de mi soledad.
A veces llegan señales de radio.
A veces algún mensaje desde el puesto de control.
Vacio.
Recuerdos que parecen historias para dormir.
Encuentro inspiración en las formas que la nada dibuja en el cielo.
Junto estrellas para formar tu rostro.
Me atormento.
Pero al final todo se reduce a unas pocas palabras:
La vida se abre camino.
Viajo por este sector desde hace unos años.
Busco señales de vida.
Cada planeta que encuentro esta muerto.
Ruinas de antiguas civilizaciones me reciben.
Polvo y recuerdos.
Los esqueletos de naves gigantescas orbitan alrededor de mi soledad.
A veces llegan señales de radio.
A veces algún mensaje desde el puesto de control.
Vacio.
Recuerdos que parecen historias para dormir.
Encuentro inspiración en las formas que la nada dibuja en el cielo.
Junto estrellas para formar tu rostro.
Me atormento.
Pero al final todo se reduce a unas pocas palabras:
La vida se abre camino.
sábado, 6 de noviembre de 2010
Día seis.
Unas montañas rojas se veían a lo lejos.
El equipo de música reproducía una canción de los Killers.
Hacía tiempo que el cigarro se había apagado, pero seguía en mi mano.
Hacía tiempo que todo había acabado, pero yo seguía jugando.
A veces pienso que el mundo se pone en contra mía para ponerme a prueba, para ver si verdaderamente me importan las cosas.
Para demostrarme que me merece la pena y que no.
Otras veces pienso que es mala suerte.
Aunque ahora estuve pensando y me di cuenta de que no tengo razón en ninguna de las dos opciones.
Si la vida es dura, es para que los buenos momentos sean mejores.
Que cada gota de sangre llena de vino nuestras copas.
Que cada caída nos enseña el mundo que hay a nuestros pies y cuando levantamos vemos el cielo que hay sobre nosotros.
Hay obstáculos que se deben sortear otros que se deben derrumbar, pero ninguno debe ser ignorado.
En el núcleo de la galaxia reside mi tesoro y entre valles de estrellas y ríos de luz navegare.
No hay piratas que me hagan frenar ni tormentas galácticas que hundan mi barco.
Soy el capitán de una nave que vuela hacia un tesoro.
No es un tesoro lleno de oro.
No hay joyas en mi tesoro.
Pero a mi no me importa.
Yo solo quiero dormir.
El equipo de música reproducía una canción de los Killers.
Hacía tiempo que el cigarro se había apagado, pero seguía en mi mano.
Hacía tiempo que todo había acabado, pero yo seguía jugando.
A veces pienso que el mundo se pone en contra mía para ponerme a prueba, para ver si verdaderamente me importan las cosas.
Para demostrarme que me merece la pena y que no.
Otras veces pienso que es mala suerte.
Aunque ahora estuve pensando y me di cuenta de que no tengo razón en ninguna de las dos opciones.
Si la vida es dura, es para que los buenos momentos sean mejores.
Que cada gota de sangre llena de vino nuestras copas.
Que cada caída nos enseña el mundo que hay a nuestros pies y cuando levantamos vemos el cielo que hay sobre nosotros.
Hay obstáculos que se deben sortear otros que se deben derrumbar, pero ninguno debe ser ignorado.
En el núcleo de la galaxia reside mi tesoro y entre valles de estrellas y ríos de luz navegare.
No hay piratas que me hagan frenar ni tormentas galácticas que hundan mi barco.
Soy el capitán de una nave que vuela hacia un tesoro.
No es un tesoro lleno de oro.
No hay joyas en mi tesoro.
Pero a mi no me importa.
Yo solo quiero dormir.
jueves, 4 de noviembre de 2010
Día cinco.
Soñé con que era un alquimista y que convertía el plomo en oro.
Soñé con ser el Rey Midas.
Soñé que todo a mi paso era bueno y que no había nada que pudiera ir mal.
La suerte estaba de mi parte y mis palabras eran música en tus oídos.
Soñé.
Pero como pasa en todos los sueños, desperté.
Abrí los ojos y mi mirada era como un basilisco y mis manos eran llamas que convertían la vida en ceniza y mis palabras...mis palabras cuchillos que caían sobre ti.
Muchas veces me paro a pensar si de verdad quiero seguir viviendo.
Muchas veces he pensado en darle fin a todo esto.
Pienso que quiero morir, que nada es importante...pero entonces sigo pensando.
Y pienso...y recuerdo.
Recuerdo tu voz que me despertaba.
Recuerdo como me gustaba viajar por tus universos.
Recuerdo cada atardecer que pase pensando en ti.
Recuerdo cada beso, cada roce de tu piel.
Recuerdo.
Y entonces veo que el dolor nunca sera más fuerte que la alegría.
Veo que aunque el universo sea oscuro, las estrellas nunca dejan de brillar.
Entonces miro al cielo.
Y se.
Se que allí arriba, entre las millones de estrellas, entre asteroides y anillos.
Más allá de las nebulosas, pasando los bordes del universo y los límites de la realidad.
Se que tienes guardada esa parte de tu alma que sabes que tanto me gusta.
Y segundos antes de morir entiendo que algo tengo por lo que vivir.
Es entonces cuando despierto y me doy cuenta de que volverá a amanecer.
El viento puede con una cerilla...pero nunca podrá con un incendio.
Soñé con ser el Rey Midas.
Soñé que todo a mi paso era bueno y que no había nada que pudiera ir mal.
La suerte estaba de mi parte y mis palabras eran música en tus oídos.
Soñé.
Pero como pasa en todos los sueños, desperté.
Abrí los ojos y mi mirada era como un basilisco y mis manos eran llamas que convertían la vida en ceniza y mis palabras...mis palabras cuchillos que caían sobre ti.
Muchas veces me paro a pensar si de verdad quiero seguir viviendo.
Muchas veces he pensado en darle fin a todo esto.
Pienso que quiero morir, que nada es importante...pero entonces sigo pensando.
Y pienso...y recuerdo.
Recuerdo tu voz que me despertaba.
Recuerdo como me gustaba viajar por tus universos.
Recuerdo cada atardecer que pase pensando en ti.
Recuerdo cada beso, cada roce de tu piel.
Recuerdo.
Y entonces veo que el dolor nunca sera más fuerte que la alegría.
Veo que aunque el universo sea oscuro, las estrellas nunca dejan de brillar.
Entonces miro al cielo.
Y se.
Se que allí arriba, entre las millones de estrellas, entre asteroides y anillos.
Más allá de las nebulosas, pasando los bordes del universo y los límites de la realidad.
Se que tienes guardada esa parte de tu alma que sabes que tanto me gusta.
Y segundos antes de morir entiendo que algo tengo por lo que vivir.
Es entonces cuando despierto y me doy cuenta de que volverá a amanecer.
El viento puede con una cerilla...pero nunca podrá con un incendio.
Capítulo 1
Ultimamente anochece más rápido.
Además hace mas frío y siento como si poco a poco me estuviera volviendo de hielo.
Paso las tardes vagando por las calles de una ciudad que agoniza.
Miles de años de evolucion que terminan aquí.
En una ciudad gris y vacía.
El Fin de la humanidad.
El vació terrenal...y yo sigo aquí.
Hace tiempo que no veo las luces de antaño.
Los viejos sonidos ya no vuelven en mis sueños.
Podría decirse que ya estoy completamente solo.
La noche es eterna y el sol no ilumina.
Y cuando parece que ya entiendo lo que es estar solo, despierto.
En este mundo más gris aún.
Lleno de gente sola y de mentes brillantes que se pudren en las esquinas.
Un mundo vivo, que se muere por aprender a vivir.
Y así son todos los días.
Sueño que estoy solo, despierto y veo que entre toda la multitud estoy solo.
Veo que no puedo unirme a su rebaño.
Quiero ser uno más, quiero ser normal...pero ¿cómo serlo cuando ni siquiera soy humano?... ¿cómo ser normal cuando se cómo y cuando va a acabar con todo esto?
Yo no elegí saber, pero era mi destino.
Además hace mas frío y siento como si poco a poco me estuviera volviendo de hielo.
Paso las tardes vagando por las calles de una ciudad que agoniza.
Miles de años de evolucion que terminan aquí.
En una ciudad gris y vacía.
El Fin de la humanidad.
El vació terrenal...y yo sigo aquí.
Hace tiempo que no veo las luces de antaño.
Los viejos sonidos ya no vuelven en mis sueños.
Podría decirse que ya estoy completamente solo.
La noche es eterna y el sol no ilumina.
Y cuando parece que ya entiendo lo que es estar solo, despierto.
En este mundo más gris aún.
Lleno de gente sola y de mentes brillantes que se pudren en las esquinas.
Un mundo vivo, que se muere por aprender a vivir.
Y así son todos los días.
Sueño que estoy solo, despierto y veo que entre toda la multitud estoy solo.
Veo que no puedo unirme a su rebaño.
Quiero ser uno más, quiero ser normal...pero ¿cómo serlo cuando ni siquiera soy humano?... ¿cómo ser normal cuando se cómo y cuando va a acabar con todo esto?
Yo no elegí saber, pero era mi destino.
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